martes, 27 de mayo de 2008

No seré feliz pero tendré Carnet

Henos aquí habiendo elegido un oficio que exige nuestro aparato fonador al máximo.

Henos aquí que, por lo tanto, debemos cuidar mucho más que los simples mortales nuestro cuerpo, anche nuestro espíritu.

Henos aquí que debemos alejarnos de este hedonista mundo para sumergirnos en un ascético universo que en el final del tunel nos brindará un título terciario y una habilitación profesional. ¡Aleluya, Eteritos! ¡La abstinencia sea con vosotros!

No fumar.
No beber alcohol.
No beber café.
No consumir cafeína (vale para el speed o sucedáneos).
No respirar por la boca (cuando no locutamos, obvio, nene).
Postura corporal correcta todo el día. No te desparrames en la silla o sillón. No te tires encima de la mesa. No te cuelgues diez horas en la compu, vas a necesitar un transplante de cervicales.
No carraspees.
Toma mucha agua, nada peor que las cuerdas vocales deshidratadas (café y alcohol las deshidratan).
Evitar las cenas abundantes, favorecen el reflujo gastroesofágico.
No aire acondicionado, cagate de calor. No calefacción, cagate de frío.
Dormir mínimo de siete a ocho horas. Cerrá el MSN nena, ¿no ves la hora?
La Coke (y la porquería de la Pepsi, también) te hacen tanto pelota como el café.
No cancha.
No boliche.
No recitales.
Hablá lo justo y necesario (¿y cómo le saco el cuero a la boluda que se puso ese vestido amarillo en el casamiento?, bueno, esa podría ser una charla justa y necesaria).
No vida agitada.
No estrés.
No descontrol emotivo.
No nervios.
(¿qué somos? ¿esponjas?)
No hablés si hacés ejercicio.
No a los picantes.
Sí a la dieta balanceada. Muchos vegetales, frutas y granos enteros (¿es necesario?).
No reír a carcajadas.
No hablar rápido.
No susurrar (provoca tensión en la laringe.... ¿y cómo le digo cositas lindas al oído?).
No apretés los dientes ni tensés la mandíbula.
No hablés en frío. Levantáte un par de horas antes de usar la voz profesionalmente y anda calentando de a poco.
Evitar áreas polvorientas o con humo.
Eterita ama de casa, si tenés que usar químicos, pinturas o artículos de limpieza, usá barbijo que te cubra nariz y boca. O decíle a tu maridito que se pague una shitze.
No hablés desde lejos, se fuerza la voz (bancáte acercarte al pescado ese, sí).
Eterita, acordate que durante la menstruación y en los períodos pre y post menstruales el cuarpo se altera por la variación del nivel hormonal. Hablá lo menos posible en esos días.
Eso sí. Eteritos y eteritas, no os asustéis con la prohibición de sexo. Nada ha demostrado científicamente que una actividad sexual razonable vaya en contra de nuestra actividad.
Obvio que si estuviste dele que dele hasta las 8 de la mañana, y a las 9 vas a la radio, no vas a estar bien.
Obvio que si en medio del mimaje te tomaste dos botellas de champagne, te fumaste un paquete de puchos, te clavaste un caño de diez centímetros, te mandaste una pepa, te jalaste un par de líneas, no vas a tener la voz de lujo.
Obvio que si para encontrar una compañía te recorriste medio Buenos Aires y alrededores, y terminaste a las diez de la mañana, arriba del auto, en los bosques de Palermo, con alguien que ni recordarás su nombre un par de horas después, no pretendas que tu voz suena agradable.
Pero quedate tranqui, el triki triki no atenta contra la calidad vocal.
Seguí estos consejos, y tu voz sonará increíble.
Eso sí, de ser feliz hablamos otro día.





1 comentario:

Anónimo dijo...

Primero que nada, nuestras voces suenan increibles, o sea, estamos aca!Solo hay que pulirlas un toquesin..jaja
Segundo, ser felices podemos, no beberemos cafe ni mate ni te y nosotras (chicas a uds les hablo)trataremos de evitar caer en el chocolate ante una caida, pero con la manada medio rara en la que estamos, se re pasa y somos felices, pronunciando el frances y haciendo telenovelas en locucion. Asi que no es para tanto!!
Arriba el animo, que despues de la tormenta siempre llega la calma, y el CARNET!!